28 enero 2006

Turismo. Las consecuencias de una mala gestión

Subir al Teide y pararse en uno de los múltiples miradores que se encuentran en el camino, es una experiencia inolvidable. Existe un mirador en particular cuyo acceso se encuentra lleno de socavones, se trata del Mirador de Chipeque, ubicado en el Paisaje Protegido de Las Lagunetas. Aparte de la mala imagen que da la pequeña carretera de acceso a dicho mirador, una vez que los turistas descienden de la guagua, quedan embriagados por la belleza de las vistas.


Y muchos pensarán que algo así puede llevar poco tiempo y que es un hecho aislado, así que tiramos la crítica a la basura.


¡Ups! No ha sido buena idea tirar la crítica tan pronto, aún así seguro que en un mirador siempre se puede encontrar algo en perfecto estado...como un segundo panel informativo, estamos de suerte.


Vaya, tal vez tengamos razón. La mala gestión que las instituciones hacen de nuestro patrimonio natural tienen consecuencias más nefastas que un simple cristal roto. Y es que si fuésemos nosotros los turistas, al volver a nuestro país, diríamos que Tenerife es muy bonito pero está muy descuidado, así que mejor probar en otra isla o archipiélago la próxima vez.